marzo 2025
L M X J V S D
 12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930
31  
16 de marzo de 2025

NoticiasenRed | Noticias en la nueva red internacional

NoticiasEnRed es una plataforma de noticias en línea dedicada a proporcionar información precisa y actualizada a nuestros lectores.

El Real Madrid se lo pasa bomba contra el Manchester City de Guardiola (3-1)

Pep Guardiola era esa pesadilla que sueñas dos noches y te persigue durante el día, como una sombra. Más allá de la lógica, un recuerdo constante, pese a las victorias tan contundentes que, varias veces, ha logrado el Real Madrid en todos estos años de enfrentamientos y odio. Un odio sostenido, que parecía inacabable, un odio que daba valor a los contendientes. Era el Guardiola del Barcelona de Messi, el de los recados más o menos independentistas en momentos estratégicos, el Guardiola que no hace mucho le hizo cuatro goles y el que el año pasado sometió al Madrid, sin éxito, a una tortura en el Etihad. Era Guardiola, hoy destruido.

El Real Madrid se dio la mejor fiesta de la temporada contra el rival más temido. Fue un partido perfecto contra un contrario sin alma ni personalidad, un equipo completamente agotado. Había cierto recelo sobre lo que podía pasar porque el resultado del encuentro de ida se quedó corto, pese a los méritos del Madrid. Había avisado Ancelotti a sus jugadores contra la relajación o el olvido de las tareas defensivas, esa idea que, paso a paso, miga a miga, parece que ha conseguido instalar por fin en sus hombres de arriba. Bellingham volvió a ser el futbolista entregado y, aun así, elegante, y pocas veces ha mantenido Rodrygo la línea de cuatro con la fiabilidad con la que lo hizo contra el City. Para después, además, ser decisivo en ataque.

 

Con un Madrid muy bien plantado y sin prisa, con un City en principio dominador, parecía que iba a haber partido, de ahí el recelo. Era falso, un prejuicio, una mala jugada de la memoria. No había partido. El Madrid era infinitamente superior. Se vio la primera vez que pasó el balón al campo del City, un pase largo de Asencio, que Mbappé ganó a una defensa que era de papel y que terminó con una vaselina a Ederson, el portero del Manchester City, al que se le ha caído el prestigio en estos dos encuentros contra el Real Madrid.

Era el minuto cuatro del partido y no hubo más. O sí, una fiesta por parte del Madrid, un ansia de la grada por hacer sangre y un City que era un sonámbulo, sin nada que ofrecer, ni siquiera Haaland, que no fue titular, quizá más por problemas físicos que por estrategia de Guardiola. Si era un truco en la manga, una idea para sorprender y para que del sombrero saliera un conejo, no funcionó. No hay nada bajo las mangas de Pep.

 

El Real Madrid no dio opción tampoco. Suena bien este Madrid, tiene buena pinta si mantiene el espíritu y consigue no despistarse. Suena bien porque Valverde en la banda le da una consistencia que estaba echando mucho en falta y porque Asencio se ha convertido en defensa titular y eso no va a haber quien lo cambie. Se ha convertido en un ejemplo futbolístico para la cantera. No es el defensa más valorado de Valdebebas, pero estuvo en el momento oportuno y no dudó cuando vio que el tren pasaba. Su partido, como el de sus compañeros, fue espectacular.

El segundo gol fue el resumen del encuentro. La jugada la empezó Courtois y, tras unos pases atrás, todo cambió en un pase largo que bajó Rodrygo como quien rueda la mejor escena de una película. A partir de ahí, todo empezó a correr, con Valverde, Bellingham, Vini, Rodrygo y, finalmente, Mbappé. El Madrid volaba, los defensas del City se molestaban entre ellos.

El Madrid jugó como quiso y el delantero francés aprovechó para meter el tercero y firmar su segundo hat-trick de la temporada. El tercero se lo fabricó él, que recibió solo en la esquina del área. A ningún defensa rival se le ocurrió que no es buena idea dejar a Kylian por ahí rondando. Pero es que los jugadores de Guardiola llegaban tarde a las jugadas, iban más lentos, no tocaban la pelota, mientras el Madrid la movía entre olés del público y cánticos contra Guardiola.

Fue tal la diferencia que dio la impresión de que el equipo se quedó corto. Los delanteros quisieron marcar su gol y el sacrificio o una posible sensación de revancha dieron paso a lo lúdico. El City aprovechó para maquillar el resultado con un gol que no esconde lo que pasó: que es febrero, hace calor y el Madrid vuela en Champions: ha llegado la primavera.

> Ver online el Real Madrid – Manchester City, Champions League, en MOVISTAR+

Última hora Real Madrid – Manchester City, en directo online: Champions League 2025, en vivo hoy

 El Real Madrid y el Manchester City disputaron la vuelta de la Champions en el Santiago Bernabéu  

Directo

Tres goles de Mbappé dieron la victoria a un gran Real Madrid frente a un Manchester City sin alma y frágil como el papel

Pep Guardiola era esa pesadilla que sueñas dos noches y te persigue durante el día, como una sombra. Más allá de la lógica, un recuerdo constante, pese a las victorias tan contundentes que, varias veces, ha logrado el Real Madrid en todos estos años de enfrentamientos y odio. Un odio sostenido, que parecía inacabable, un odio que daba valor a los contendientes. Era el Guardiola del Barcelona de Messi, el de los recados más o menos independentistas en momentos estratégicos, el Guardiola que no hace mucho le hizo cuatro goles y el que el año pasado sometió al Madrid, sin éxito, a una tortura en el Etihad. Era Guardiola, hoy destruido.

El Real Madrid se dio la mejor fiesta de la temporada contra el rival más temido. Fue un partido perfecto contra un contrario sin alma ni personalidad, un equipo completamente agotado. Había cierto recelo sobre lo que podía pasar porque el resultado del encuentro de ida se quedó corto, pese a los méritos del Madrid. Había avisado Ancelotti a sus jugadores contra la relajación o el olvido de las tareas defensivas, esa idea que, paso a paso, miga a miga, parece que ha conseguido instalar por fin en sus hombres de arriba. Bellingham volvió a ser el futbolista entregado y, aun así, elegante, y pocas veces ha mantenido Rodrygo la línea de cuatro con la fiabilidad con la que lo hizo contra el City. Para después, además, ser decisivo en ataque.

Con un Madrid muy bien plantado y sin prisa, con un City en principio dominador, parecía que iba a haber partido, de ahí el recelo. Era falso, un prejuicio, una mala jugada de la memoria. No había partido. El Madrid era infinitamente superior. Se vio la primera vez que pasó el balón al campo del City, un pase largo de Asencio, que Mbappé ganó a una defensa que era de papel y que terminó con una vaselina a Ederson, el portero del Manchester City, al que se le ha caído el prestigio en estos dos encuentros contra el Real Madrid.

Era el minuto cuatro del partido y no hubo más. O sí, una fiesta por parte del Madrid, un ansia de la grada por hacer sangre y un City que era un sonámbulo, sin nada que ofrecer, ni siquiera Haaland, que no fue titular, quizá más por problemas físicos que por estrategia de Guardiola. Si era un truco en la manga, una idea para sorprender y para que del sombrero saliera un conejo, no funcionó. No hay nada bajo las mangas de Pep.

El Real Madrid no dio opción tampoco. Suena bien este Madrid, tiene buena pinta si mantiene el espíritu y consigue no despistarse. Suena bien porque Valverde en la banda le da una consistencia que estaba echando mucho en falta y porque Asencio se ha convertido en defensa titular y eso no va a haber quien lo cambie. Se ha convertido en un ejemplo futbolístico para la cantera. No es el defensa más valorado de Valdebebas, pero estuvo en el momento oportuno y no dudó cuando vio que el tren pasaba. Su partido, como el de sus compañeros, fue espectacular.

El segundo gol fue el resumen del encuentro. La jugada la empezó Courtois y, tras unos pases atrás, todo cambió en un pase largo que bajó Rodrygo como quien rueda la mejor escena de una película. A partir de ahí, todo empezó a correr, con Valverde, Bellingham, Vini, Rodrygo y, finalmente, Mbappé. El Madrid volaba, los defensas del City se molestaban entre ellos.

El Madrid jugó como quiso y el delantero francés aprovechó para meter el tercero y firmar su segundo hat-trick de la temporada. El tercero se lo fabricó él, que recibió solo en la esquina del área. A ningún defensa rival se le ocurrió que no es buena idea dejar a Kylian por ahí rondando. Pero es que los jugadores de Guardiola llegaban tarde a las jugadas, iban más lentos, no tocaban la pelota, mientras el Madrid la movía entre olés del público y cánticos contra Guardiola.

Fue tal la diferencia que dio la impresión de que el equipo se quedó corto. Los delanteros quisieron marcar su gol y el sacrificio o una posible sensación de revancha dieron paso a lo lúdico. El City aprovechó para maquillar el resultado con un gol que no esconde lo que pasó: que es febrero, hace calor y el Madrid vuela en Champions: ha llegado la primavera.

>Ver online el Real Madrid – Manchester City, Champions League, en MOVISTAR+

Última hora Real Madrid – Manchester City, en directo online: Champions League 2025, en vivo hoy

Actualizado a las 08:13

 Noticias de Deportes en La Razón