Estel Solé toca muchos palos del sector cultural, es escritora, actriz, productora y directora. Ahora también ganadora del XLV Premi de les Lletres Catalanes Ramon Llull, dotado con 60.000 euros, con la novela Aquest tros de vida, que llegará a librerías el 26 de febrero. El jurado, compuesto por Carles Casajuana, Pere Gimferrer, Isona Passola, Núria Pradas, Gerard Quintana, Carme Riera y Emili Rosales, ha elegido la novela entre 53 originales. Entre los finalistas, Jordi Vilagut, Joan Mas y Jordi Barrachina.
La historia relata la crisis vital de una científica a quien le cuesta conciliar maternidad, precariedad y ambición
Estel Solé toca muchos palos del sector cultural, es escritora, actriz, productora y directora. Ahora también ganadora del XLV Premi de les Lletres Catalanes Ramon Llull, dotado con 60.000 euros, con la novela Aquest tros de vida, que llegará a librerías el 26 de febrero. El jurado, compuesto por Carles Casajuana, Pere Gimferrer, Isona Passola, Núria Pradas, Gerard Quintana, Carme Riera y Emili Rosales, ha elegido la novela entre 53 originales. Entre los finalistas, Jordi Vilagut, Joan Mas y Jordi Barrachina.
Aquest tros de vida es la segunda novela de Solé y relata la historia de una mujer científica y madre, dentro de un matrimonio en crisis donde ella es la secundaria. Vive dos contratiempos importantes que le llevan a viajar a Occitania y cambiar de vida. Solé ha destacado la importancia de las complicaciones laborales y la conciliación en la novela: “no lo quería narrar desde el sector de la cultura, pero creo que cultura y ciencia se parecen en su precariedad”.
Hablando del proceso de escritura, Solé ha hecho referencia a la polémica surgida por el discurso de Eduard Sola en los premios Gaudí, explica que viene de familia murciana y migrante, y que probablemente sea por eso que le gusta usar metáforas mineras: “la historia ya está allí, yo bajo a la cueva a buscar las palabras, hecho que me pide ser honesta y rigurosa; escribir es afrontar las propias fragilidades, es un proceso tortuoso y por eso he tardado más de tres años a acabar la novela”. Pradas, en representación del jurado, ha destacado que Solé consigue dar “voz a la protagonista sin perder el tono literario”. Solé también ha reconocido la influencia de su carrera como dramaturga en la escritura, la novela tiene mucho diálogo y, dice, “se presta a película”.
La novela vincula las dificultades de una mujer con ambición con otros temas, como la violencia obstétrica y el machismo de mujeres hacia otras mujeres, o bien las posibilidades de descubrimiento que abre relacionarse con desconocidos. También reconoce como inspiración la canción Martha de Tom Waits, donde alguien en la tercera edad llama al amor de su vida para reconocer que nunca dejó de quererla: “en la novela hay alguien que decide vivir eso que un día decidió echar de menos”.
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